Una vez leído en clase el estudio hecho por la Universidad Complutense de Madrid
sobre las redes sociales vemos que ofrecen infinitas posibilidades, tales como, entrar en contacto con gente de otros países y culturas, mantener el contacto con personas que viven a larga distancia, intercambiar experiencias y conocimientos e incluso dinamizar movimientos culturales y políticos mediante el contacto con los usuarios.
No obstante, las redes conllevan una serie de riesgos.
Los riesgos se presentan en una doble dirección. Los menores pueden ser víctimas de alguna de las amenazas o también, por desconocimiento, pueden incumplir alguna de las normas referidas a datos o informaciones de otras personas.
Vemos en nuestros días claros ejemplos de las consecuencias que pueden tener algunas de estas "quedadas" masivas convocadas a través de la red y también del daño que se puede causar a una persona tergiversando la información.